jueves, 27 de septiembre de 2012

MEXICO... PINCHE MONSTRUO

Hola hola, amores... por fin aquí, en DF, repuesto ya de la gran pérdida que ha supuesto mi querídismo ordenador y escribiendo desde uno nuevo muy majo, la verdad. Es negro, tiene Wifi y pesa muy poco.
No sé por donde empezar... casi hace 3 semanas que estamos en México y esto ha pasado volao volao.
Tras cruzar la frontera más transitada del mundo, la de Tijuana, comenzó un nuevo viaje que nada tenía que ver con los 3 meses anteriores y que percibí a los pocos minutos de andar caminando por las calles de esta ciudad límite, de la cuál se suponía que era bastante difícil salir vivo o, al menos, asaltado. Pero lo cierto es que el mexicano en general está en la fase de sonreír y agradecer, mucho más que en la de robar o molestar. A parte del robito del ordenador, no hemos tenido ningún otro contratiempo; a cambio, y gracias a este maravilloso idioma que compartimos, la comunicación es contínua y te permite descubrir a un pueblo alegre y con luz en los ojos. Como es obvio tienen sus particularidades, pero esperaré a entrar a Guatemala para contarlas, básicamente para llegar con vida porque como bien sabéis no estamos de morir.
La península de Baja California, una lengua de tierra de 1800 km. de longitud que baja paralela al continente mientras flota en el Pacífico, supuso un impacto visual tremendo. Principalmente porque se trata de un inmenso desierto deshabitado, salpicado de cuando en cuando con pequeños pueblos cociéndose lentamente bajo el sol, con personas que hablan despacio, que valoran la lentitud, que la gozan. Y el paisaje, jamás visto por mis ojos, era como estar jugando al veo veo cada minuto. Hay cientos de clases de cactus, pero quizá los más destacables son los cardones, unos bichos que pueden medir hasta 15 metros. Este es Guillem La Onda haciendo imitando a un coyote al lado de uno....


Lo cierto es que el paisaje era aún más fascinante porque, tras cuatro años sin una gota de agua, había estado lloviendo y pudimos contemplar algo bastante curioso y difícil de ver: un desierto verde...


Pero aparte de estos paisajes cautivadores, Baja ofrece unos cuantos miles de kilómetros de costa en las que se alternan calas, islas y bahías... algo a lo que es difícil no rendirte y entregarte en cuerpo y cuerpo...


En Loreto decidimos visitar la isla Coronado, situada unos kilómetros frente a la costa. Le pagamos a un pescador para que nos llevara y en el viaje, aparte de unos cuantos leones marinos y cientos de mariposas Monarca que emigraban hacia el continente, nos vinieron a visitar estas criaturas...


Es presioso, eh?
Y después de una semana de playas y relajo, cogimos un ferry de la Paz hasta Los Mochis, entrando de nuevo y ya definitivamente en el continente. Desde aquí sale el Chepe, el único ferrocarril de pasajeros de todo México que atraviesa la Barranca del Cobre, un inmenso cañon más grande y más profundo que el del Colorado, pero bastante menos accesible. El viaje en tren fue un lujo, atravesando de nuevo otros paisajes nuevos, parando en estaciones perdidas, asediadas por vendedores de la etnia tarahumara, una tribu que todavía vive en estas tierras y que intenta sobrevivir aprovechando la parada del tren...


A parte de estos moradores, la sierra está básicamente ocupada por los cultivos y los "trabajadores" del Chapo Guzmán... hemos conocido de primera mano el ambiente, hemos conversado con conocedores de la situación, hemos comprobado que lo que a los ojos de la sociedad europea no deja de ser un problema de blanco o negro, aquí resulta algo más complejo, más comprensible, con muchos más colores que no nos llegan a través de los informativos.... pero bueno, lo dicho, esto se reserva para el libro, que uno no está de morir todavía asín de joven...
Y llegamos a Chihuahua, y de allí ya encarrilamos el altiplano mexicano, la extensión que recorre el centro del país encajonada entre la sierra Madre Oriental y la Occidental a una altura de 2200 metros, altura de la que no hemos bajado en estos últimos 10 días. Y aquí en medio, en el centro del inicio de Mesoamérica, es donde la historia escribió muchos de sus capítulos. Aquí en medio es donde se encuentran Zacatecas, Guanajuato, San Miguel de Allende... pueblos fundados por las tropas jesuitas compañeras de viaje de Hernán Cortés, pueblos que escondían infitas riquezas en sus entrañas, unas tripas que rápidamente supieron vaciar los españoles gracias al eficaz y barato trabajo de una población esclavizada... A cambio, como la plata generaba riquezas sin límite, los españoles convirtieron estos lugares en auténticas joyas coloniales, plagadas de catedrales, con calles peatonales que desembocan en plazas que recuerdan el aroma de Italia, todo un escenario espectacular, luminoso y sereno habitado por el desequilibrio, el ruido y el caos de la vida mexicana, una vida que lanza gritos como si fueran caricias.
Esto es Guanajuato, una maravilla en la que hicimos amistades...






Así acabaron las amistades....




.... gente sensible, ya lo véis..
Y ahora, en DF, vamos a pasar 5 días intentando sobrevivir a una ciudad de 24 millones de habitantes que se hunde lentamente, asentada como está bajo una enorme extensión de ciénagas y lagos. Quizá los aztecas de Moctezuma no tenían pensado crecer tanto y por eso decidieron ocupar esta tierra para construir la gran Tenotichtlán, la capital de los aztecas o mexicas, pero cuando Hernán Cortés se apoderó de ella, la arrasó y comenzó la nueva construcción de la capital de la Nueva España, paradójicamente asentada sobre terreno pantanoso, terreno que, a pesar de haber sido drenado, sigue siendo inestable, débil para soportar todo este peso. De hecho, en nuestra primera visita de ayer, pudimos comprobar cómo la plaza del Zócalo, el puro centro de México, está hundiéndose lentamente, deformando iglesias, palacios, edificios y calles... y la gente, con ese espíritu resignado tan característico de los mexicanos, parece estar espernado un nuevo terremoto que la hunda definitivamente en la tierra...
Después de esta semana en DF, y si no nos hemos hundido, iremos a Puebla y sus volcanes y ya bajaremos del altiplano para acercarnos de nuevo a las playitas de Oaxaca... para entrar en las selvas de Chiapas...
Espero volver a escribir desde allí, en San Cristóbal de las Casas tenemos otro contacto, un amigo de Guillem... así que espero que allí me deje más tiempo libre para escribir con menos presión... ahora mismo hace ya más de media hora que me espera en la puerta para salir a conocer más... este muchacho no tiene fin...


Un besazo a todos.





domingo, 23 de septiembre de 2012

NOTICIA BIEN CHINGONA...

Pues si, la noticia padre es que en el Festival de Cabra nos han dado el primer premio por nuestro corto ELHIJO 10!!!!!!
Asi que ya imaginareis como andan nuestros cuerpos y almas, casi flotando. Ayer noche salimos a celebrarlo por las calles de San Miguel de Allende, bonita plaza para una noche especial.
El martes llegamos a DF, alli os contare lo de estas 2 semanas en el ordenador que me compre.
Mil besos!!!

jueves, 20 de septiembre de 2012

MÉXICO PADRE

Como era de suponer, México nos ha sorprendido. Voy a contaros un par de noticias acontecidas en estos días: una buenísima y la otra regular.
Hemos ganado otro premio con el corto ELHIJO 10!!!! Esta vez ha sido en el festival de Cabra, en Córdoba, y este fin de semana Óscar va a recoger el premio y sabremos de cuál se trata. En fin, cojonudo. Maravilloso.
La regular es que, como no podía ser de otra manera, me han robado el ordenador. Yo esperaba que sucediera un poquito más adelante, quizá en Nicaragua o Panamá, pero es que por aquí están muy "avispaos" y no le han dado al pobre ni tiempo de adaptarse a las temperaturas del altiplano.
El magnicidio ha sucedido en la bellísima ciudad colonial de Zacatecas, un lugar en el que varias personas nos han detenido por la calle solo para preguntarnos si necesitábamos algo, de dónde éramos y darnos la bienvenida. A los españoles nos quieren muchísimo, a pesar de que fundamos esta ciudad para esclavizar a toda la población con el fin de continuar extrayendo la abundante plata que posee la mina, la cuál precisamente estábamos visitando cuando nos robaron en el hotel. Paradójico, nosotros viendo el escenario de nuestras pasadas fechorías y los milnietos de aquellos esclavos devolviéndonos la moneda por otra parte. Juegos de historia.
Y sí, fue en el hotel. Llegamos y, al entrar en la habitación, lo único que se habían llevado era mi ordenador; ni siquiera se interesaron por mis calzoncillos de tigre, algo que me ha dado que pensar. Pero, como me había avisado mi amigo mexicano Roberto en Los Angeles, aquí puede pasar de todo. Y pasó. A los dos minutos de estar calibrando la nueva situación con el dueño del hotel, me ofreció pagarme los 220 euros que le dije que me había costado y, dejando de lado el valor sentimental, acepté.
Ayer noche me pagó y ahora escribo desde el ordenador del hotel. La semana que viene llegamos a la capital, DF, y allí reinvertiré el dinero y me compraré un nuevo ordenador aconsejado por Guillem, gran conocedor de las ondas. Así que hasta que estemos allí, alojados en la casa de su cuñada, no volveré a escribir. Lástima, porque tenía preparado un vídeo exclusivo y alguna que otra foto de la magnífica naturaleza del desierto de Baja California. Pero el martes que viene lo colgaré, prometido.
Ahora salimos de Zacatecas en dirección a Guanajuato, San Miguel de Allende y Querétaro, todo ciudades declaradas Patrimonio Mundial de la Humanidad.
La cosa es que antes de ayer se fugaron, no se sabe cómo, 131 presos de la cárcel de Piedras Negras, en Cohuila, el estado contiguo al nuestro. Son cosas extrñas que suceden. Pero ya nos han avisado que a los narcos no les van nuestros ordenadores y que todos tienen trabajo, así que no hay que preocuparse.
Andaremos tranquilamente hacia DF y allí, aposentados, os contaré fuertemente las impresiones de esta tierra azteca.
Algo que me parece poético y precioso es que los mexicanos, para designar cualquier cosa, acción o persona que sea muy buena, casi extraordinaria, dicen que es "padre". Así, la comida, una mujer y nuestro viaje, les parecen "muy padre" o "padrísimo".
Un besazo enorme, gueys!!!



lunes, 3 de septiembre de 2012

MEMORÁNDUM OF THE NORTH

Hola hello hi... here I am, como se dice por aquí. Aunque parezca mentira, ya son 3 meses los que se cumplen desde que zarpé de Barcelona y, aunque parezca más mentira, mi inglés ha despertado para no volver a dormir jamás... en fin, que ya se decir tos, enchufe y surf.
Bueno, a punto de entrar en este nuevo mundo que me espera a las puertas de Tijuana, he decicido hacer una especie de resumen de lo que me ha parecido el american way of life. Antes de nada he de decir que voy a dejar este continente del Norte sorprendido por la gran cantidad de tipos americanos cojonudos que me he cruzado en estos meses. La apreciación que hice nada más llegar a New York (ahora ya sé inglés y por eso no digo Nueva York) se confirma a estas alturas: es una sociedad supercomunicativa, sin ningún temor ni prejuicio estúpido a la hora de interpelar a cualquiera y establecer, en cuestión de segundos, una conversación a gusto del consumidor. He visto dialogar y entenderse a personas que, bajo nuestra lupa, casi no se reconocerían como de la misma especie y que aquí incluso se sonríen con la mirada. Esa es la más importante de las diferencias que los separan de nuestra timorata sociedad, siempre midiendo.
Eso respecto a las personas, otra cosa es la sociedad, el conjunto.... después hablaremos de ello.

Para rematar mi visita en Las Vegas, sólo un apunte. Volví allí para devolver el coche que había alquilado tras recorrer durante 2 semanas parte del estado de Nevada y más parte aún de California. Un placer, la verdad, atravesar esos inmensos paisajes al volante de un coche, solo, música country de la radio y el flequillo al viento. Allí en las Vegas conocí a un tipo de esos que normalmente se conoce como pata negra. Tom, de San Francisco, escritor, guionista, life coach y nómada, según rezaba su tarjeta. 55 años y todos los tiros pegados. Vivía 5 meses en San Miguel de Allende, un delicioso pueblecito mexicano por el que voy a pasar en el que están exiliados decenas de artistas de todo el mundo, y otros 5 meses en Bariloche, en la Patagonia argentina, que será donde me vuelva a encontrar con él. Y durante 2 meses residía en USA por otras cuestiones. Este señor había descubierto el misterio de la vida y no dejaba de sonreír. Cuando le dí a probar el roquefort con pan con tomate, aceite y sal... se emocionó.
Respecto a Las Vegas, sólo una foto que resume muy bien lo que es esta ciudad y que hará las delicias del Viejo, el Manu, el Pincha, el Luigi (o Ismael), el Goyito, el Bicho y el Negro, mis compañeros de la partida de póker mensual que creo que están dejando morir....



.... pues sí, en las piscina de los hoteles también te espera el vicio. Puedes acabar de pegarte un bañito en esa piscina con acuario incluido y unas fantásticas señoritas esperan a echarte unas manos... así que si entras en esta ciudad, pocas opciones tienes de salir indemne.

Así que entregué el coche y al día siguiente salí escopeteao de Las Vegas pero, curiosamente, con un muy buen sabor de boca. Cogí el autobús a Los Angeles, en adelante LA. Y volví al cemento por largo tiempo tras haber estado varios días asilvestrado. En Norteamérica, la experiencia del cemento no tiene nada que ver con Europa. Este es un Norte nuevo, sin pasado, sin historia, si lo comparamos con la vieja Europa. La gran obra de Norteamérica es la naturaleza, bestial, salvaje, virgen y conmovedora. Aquí el humano se ha instalado donde ha podido, donde la tierra y sus viejas costumbres le han dejado. Pero la obra urbana, lo que el humano ha aportado para enriquecer el paisaje, es bastante pobre a mi juicio. Y es lógico ya que, vuelvo a repetir, es una sociedad nueva. LA, por ejemplo, fue fundada en 1781, hace poco más de 200 años, y este humano nuevo que llegó estaba por otras cosas más importantes que la arquitectura. Lo mismo sucedería, supongo, si hubiera ocurrido al revés, en Europa. La visión humana en estos últimos siglos se ha concentrado en utilizar la vida para amasar riqueza, aunque no sepamos para qué, y eso no dejaba lugar para crear obras que alimentaban el espíritu y no la tripa y que podían tardar en finalizarse varios lustros. Creo que todas las maravillas fueron realizadas ya hace muchos siglos y de eso nos enorgullecemos en Europa, del trabajo de nuestros abuelos. Esa es la suerte que tenemos. América ofrece amplitud y altura, pero no ofrece el aroma de Florencias, Barcelonas ni Parises. Esta es la catedral de Los Angeles...


... ¿entendido, verdad?.

Los Angeles es un mastodonte con un área urbana de 16 millones de habitantes viviendo todos en casitas bajas por miedo, entre otras cosas, a los terremotos. Así que la ciudad es inacabable y, para mí, la menos atractiva de las que he visitado. Sin embargo, ofrece la síntesis perfecta de la realidad de los USA que he interpretado en mi viaje. Es esta...



... el sueño americano y el americano sin sueños. La imagen que el país irradia al mundo y lo que se esconde tras ella. La luz y la sombra.
Hace ya muchos años, éramos unos niños, tuve mi primer contacto con Hollywood. Junto a mi amigo Alain, una persona deleznabe, y mi amigo Chacón, este sí, un auténtico miserable, acabábamos una noche de borrachera. Amanecía, los pájaros cantaban. Recuerdo el momento exacto en el que Alain y yo decidimos venir a probar fortuna a Hollywood bajo los primeros rayos de sol. No sé que tipo de fortuna, porque él era en ese momento transportista y yo ni eso. Pero bueno, teníamos su furgoneta, una Nissan Trade de carga de mulas. Aunque aún recuerdo mejor las lágrimas del Chacón despidiéndose de nosotros, abrazándonos, dando a sus dos amigos por perdidos, sin atreverse a acompañarnos en nuestra aventura. Se despidió con la mano alzada y balbuceando un "tíos, que os vaya de puta madre... y escribir". Alain aparcó la furgoneta un poco más adelante y nos echamos a dormir la mona. Al ver a este señor en el paseo de la fama, me acordé de lo que pudo ser nuestra aventura en Jolibú.
Porque esta es una de las cosas, aunque penséis que soy pesadito con los "piojosos de siempre", que más me ha impactado. No precisamente este señor, con esa tripa abundante, pero es ingente la cantidad de personas de todas las edades, colores y tamaños que ves en todas las ciudades que están completamente al margen, sin ningún tipo de protección, solos en la vida y completamente derrotados. Si la tristeza tuviera cuerpo sería así. Además parece que hayan pactado secretamente un concurso de a ver quién es el que viste más andrajosamente, quién presenta la imagen más extravagante. Es una presencia constante que oscurece todo lo demás. Incluso he visto a un chaval tirado en la calle con la mirada perdida y unas lágrimas tatuadas que se descolgaban de sus ojos...

Y la verdad es que es para llorar. Esta sociedad, en conjunto, tiene un objetivo muy muy claro. Ganar dinero es triunfar. Hacerte rico es la meta. Y como es lícito  y moral, se ha perdido la verguenza. Los tiburones enseñan los dientes sin prejuicios, todos juegan al mismo juego. Esto son anuncios de abogados, en autobús y metro...





... notaréis que, a pesar de ser Los Angeles, los anuncios están en español, apuntando hacia un público muy concreto, muy abundante, muy desvalido...
Y esto, al lado mismo del hostel, en el Hollywood Boulevard, no tiene precio...



... el cartelito de no pare de sufrir era de una tienda-iglesia... exponían sus interesantes resultados...



.... lo primero, como véis, es que el empleado pasó a ser dueño y ahora tiene 10 ranchos, 8 casas y 15 carros. De nuevo, el español presente como el idioma para un público de segunda B, pero los que juegan en primera también practican el mismo deporte, solo que en inglés y sin sordidez.

Y como estoy a tres días de entrar en México, visité la biblioteca central de LA para documentarme brevemente de mi nuevo destino. Es increíblemente gigante, hay de todo lo que busques y se pueden pasar varias vidas allí. En un libro de historia mexicana comprendí el porqué de algunas cosas que me voy a encontrar...

En el hostel de LA he tenido la suerte de conocer a Roberto de La Rosa, atentos a este nombre porque en algunos años vendrá de gira por Europa. Roberto es un joven "pasado de verga" del DF, la capital de México. Es abogado y podía estar disfrutando de una plácida vida en su ciudad; tenía lo que hay que tener para ser de primera división. En cambio, dejó el trabajo y se ha venido a LA de la mano de su pasión: la música. Estilo: hardcore, aunque realmente bueno.
Pues bien, Roberto trabajaba allí y mantuvimos varias noches algunas conversaciones interesantísimas sobre su país. Es un tipo culto, nervioso, con gran sentido del humor y gran concedor de las diferentes clases de cerveza. Un chaval de esos que se hacen querer. Me enseñó las bases de su idioma (chela, no mames, guey, pasado de verga, me vale verga, etc) y también me aconsejó los sitios a evitar para llegar con vida a Guatemala.
Me explicó cosas curiosas y más que curiosas. El resumen es su frase preferida: México mágico, guey. El país en el que todo, todo, puede pasar.

En el hostel también trabajaba Pepe, otro tipo cojonudo, éste de Madrid, que estaba en LA intentando hacerse un hueco en la industria del cine ya que él era técnico en efectos especiales. Esta es la foto de los tres una noche que cenamos una impresionante tortilla de patatas...


... el mexicano pasado de verga es el de enmedio, os lo juro...
Con Pepe, que era conductor, me fui una mañana a Venice Beach, la playa más friki de LA y más allá. Aunque, eso sí, la entrada es magnífica.


Y sí, tuve mi bautizo en el mundo del surf. Esto es California, así que era el lugar y el momento. Cansado de cabalgar las olas, cansado de sembrar admiración en la playa por mi rápido aprendizaje, salí del agua y me hice esta foto... lo de la derecha es mi cuerpo...



... majo, ¿eh? Igualico que los de la peli "Le llaman Bodhi"...

Bueno, niños y niñas, pues eso... México espera. El viernes llega Guillem a Tijuana y empieza otro viaje en otro mundo, sin duda el que más quiero saborear... y además acompañado de La Onda, que así se llama Gullem de apellido.
Y aquí estoy ahora, en San Diego, a unos kilómetros de la magia. Estos 3 días los voy a aprovechar para ir a la playa y engordar tranquilamente, sin sobresaltos.
Supongo que más tarde añoraré toda esta inmensa Norteamérica. Comenzó siendo un gran monstruo y finalmente he descubierto su cara amable. A pesar de todos los pesares creo que esta maravilla siempre me pedirá...

 
Un beso enorme a todos. La próxima ya será desde México mágico....

Ah¡¡ A mis amigos del Pardal que se reúnen este viernes para la cena les mando un beso beso...
A ver si me lo devolvéis, cabrones....